La boda con estilo de Fátima y Antonio en un cortijo cordobés.

La boda de Fátima y Antonio viene con la belleza de la más auténticas #bodasconÑ: del estilo rústico, las paredes blancas, el atrezo de labranza y de los patios llenos de flores tan típicos de un cortijo andaluz dónde celebraron su boda «mágica como ellos; cercana, emocionante y emotiva hasta la lágrima», como nos cuentan las fotógrafas Días de vino y rosas.

Los novios aunque son cordobeses viven fuera, por eso confiaron en la wedding planner Indira Anzola para ayudarlos con la organización y decoración de la boda (de quien ya hemos mostrado cuán bonito llega a ser su trabajo AQUÍ y AQUÍ). El resultado fue una boda cargada de detalles especiales y momentos mágicos, empezando por la ceremonia bajo una precioso pérgola arbolada, la barra libre de pétalos para los recién casados, las sombrillas que protegían a los invitados durante el cóctel, la candy bar o el original rincón de dulces caseros y típicos del pueblo. Como broche final un concierto en directo con un grupo que tocó temas de los 80 y 90 haciendo bailar a novios e invitados.

Y Fátima, guapísima con vestido de novia de Raimon Bundó, corona de semillas de Tocados Le Touquet y ramo de novia de astile al que agregó un pequeño guardapelo con un recuerdo muy especial para ella. Ah si!, y mención especial para la pequeña niña de las arras con su vestido blanco y corona de rosas que la hacía ir totalmente adorable.

Fotos, cortesía ©Días de vino y rosas