No ha habido exclusiva en los medios (ni falta les hizo). Ni prohibición de usar los móviles. Al contrario, todo ha sido retrasmitido en directo a través de Instagram, y el mundo ha sido testigo. Sólo los IG stories del novio han tenido 3 millones de visualizaciones cada uno, y hablamos de vídeos de 15 segundos. La novia, que cuenta con más de 14 millones de seguidores en esta red social, está obteniendo entre 1 y 2 millones de likes en cada publicación de su boda. Un dato abrumador si tenemos en cuenta que este es el share que llega a tener un buen programa de televisión en España o Italia. Pero aquí el prime time estuvo en otra ‘pequeña pantalla’ y lo lideró la boda de la “influencer de las influencers” (según la revista Forbes) Chiara Ferragni y el rapero Federico Lucia, alias Fedez.

Seguidores de la pareja –y curiosos– han visto, reproducido y/o compartido todo el material que se ha generado del enlace en sus dos días de festejos. Recordemos que todo empezó el viernes, con la celebración de su impresionante fiesta pre-boda. En 48 horas el hashtag oficial #TheFerragnez ha generado más de 17 mil publicaciones, sin contar con todos los medios y revistas, incluida Tendencias de Bodas Magazine, que nos hemos hecho eco de los detalles que genera la boda de Chiara Ferragni y Fedez. De ahí el éxito sin precedentes de este enlace, cuyas expectativas, opiniones y repercusión podría compararse con la de cualquier royal wedding. Lo siento por otras influencers, pero Chiara acaba de alcanzar mediáticamente –también– la cima del mundo nupcial.

Chiara Ferragni y Fedez convirtieron su enlace en la ‘royal wedding’ de Instagram, con millones de espectadores pendientes de cada detalle.


 

Chiara Ferragni y Fedez el día de su boda, este 1 de septiembre 2018 (Foto, ©David Bastianoni)

 

Extravagante, romántica, divertida… Así ha sido el bodorrio italiano de Chiara Ferragni.


 

A diferencia de otras famosas que también han patrocinado su boda y que la han compartido vía talonario y/o exclusiva, la estrategia (comercial) de Chiara Ferragni ha sido compartirla abierta y espontáneamente. Y a la vista de la repercusión, le ha dado resultado. Si comparas su perfil con la de otras instagramers verás que el suyo es inusual, ya que la italiana no está obsesionada con publicar la fotografía perfecta, con el filtro ideal y el encuadre trendy. Ni siquiera hace alarde de exóticas y paradisíacas vacaciones ni copiosas comidas en bodegones maravillosos. La suya es una cuenta espontánea (en cercanía), cuyo postureo se basa en su ostentación por las marcas de lujo. Tampoco busques en sus estilismos la clase y elegancia de Grace Kelly o el glamour bohemio de Kate Moss. Chiara ha creado su imperio siendo ícono del nuevo ‘lujo hortera’, ese que también abanderan celebrities como Kim Kardashian o Rihanna. Un estilo que le ha valido para poner a sus publicaciones la etiqueta de “supplied by…” Sí, también en las de su boda.

Extravagante, romántica, excesiva, empalagosa, divertida, un sueño… Muchas son las opiniones que ha generado la grandilocuencia del bodorrio de Chiara Ferragni y Fedez. Nunca mejor usada esta palabra (ver bodorrio), y ciertamente es un poco de todo eso. No han escatimado en lujo, pompa y detalles. Ni siquiera en el presupuesto en flores o la factura de la luz. Todo ha sido a lo grande y un fiel reflejo de la propia pareja, que al final es lo que debe primar en una boda, acapare o no opiniones favorables, portadas y likes.

Personalmente me ha gustado la boda, incluidas sus excentricidades; que si bien en momentos resulta ‘too much’, están perfectamente hiladas y ejecutadas, con un trabajo de diseño y planificación impecables a la vista. Y si lo piensas podía ser peor, ya que Chiara y Fedez podían haber querido una boda mucho más hortera… tipo boda de futbolista =P

Chiara Ferragni y sus seis damas de honor durante los preparativos (Foto, ©David Bastianoni)
El vestido de novia de Chiara fue un diseño de Maria Grazia Chiuri para Dior (Fotos, ©Sophie Carre)
Chiara Ferragni durante los preparativos, con su zapatos J’Adior y el mono de crochet (Fotos, ©David Bastianoni)

 

Para el “Se voglio, amore” Chiara Ferragni lució un vestido de novia de Dior Haute Couture.


 

A muchos sorprendió la imagen de novia romántica y ‘tradicional’ de Chiara Ferragni en su ceremonia. La responsable fue la diseñadora y directora artística de Dior, Maria Grazia Chiuri, que la convenció de “hacer dos vestidos: uno de ensueño, más tradicional y otro de fiesta”. Así, el primero de los tres vestidos de novia que lució Chiara a lo largo del día, es un diseño que reinterpreta el estilo princesa para evocar la energía y personalidad de la mujer moderna. Un vestido de alta costura de dos piezas con un mono de cuello alto, mangas 3/4 y pantalón short confeccionado a mano en ganchillo, y una gran falda de tul de líneas puras y abertura frontal que requirió 400 metros de tela, y más de 1.600 horas de trabajo.

Su look de novia se completó con un sencillo velo de tul, joyas minimal en oro blanco y unos zapatos J’adior blancos, personalizados con su nombre y realizados exclusivamente para ella por la maison francesa. Del beauty look se encargó su maquillador personal, Manuele Mamel, quien ideó un look para cada vestido y momento, que iban subiendo de sintonía a lo largo de la boda. Para la ceremonia, se decantó por un moño bajo deshecho con dos mechones en la frente, y un maquillaje muy natural con labios en rosa mate.

Su ramo de novia de tanacetum es un bouquet silvestre que ponía el toque perfecto de sencillez y equilibro.

La madre de Chiara Ferragni y sus seis damas de honor durante de la ceremonia (Fotos, ©David Bastianoni)

 

Las damas de honor lucieron vestidos de confección sostenible diseño de Alberta Ferretti.


 

Sus seis damas de honor lucieron exclusivos diseñados de Alberta Ferretti en colaboración con Eco-Age, una de las diseñadoras preferidas de Chiara quien deseaba contar con grandes nombres de la moda italiana en su boda. Valentina y Francesca Ferragni, Martina Maccherone, Michela Gonbacci, Verónica Ferraro y Pardis Zarei llevaron vestidos en georgette de seda rosa con incrustaciones de encaje plisado en dos versiones: con escote en V o escote corazón. La singularidad parte de la confección sostenible de los vestidos realizados con materiales reutilizados, como el propio tejido, el foro o las cremalleras. La diseñadora declaró que no sólo pensó en hacer algo único y especial para la boda de Chiara, sino también en lanzar un mensaje “que comunica la belleza ética” con la creación de estos vestidos ecosostenibles.

La madre de la novia, Marina Di Guardo, también vistió un diseño a media de Alberta Ferretti; un vestido etéreo en gasa azul y hombros al aire. Ella sería la encargada de abrir el cortejo nupcial junto al pequeño Leone, el adorable hijo de la pareja que acaparó todas las miradas a sus 5 meses de vida.

Como curiosidad, todas llevaban una rosa blanca a modo de corsage.

La entrada de la novia y el novio, Fedez, durante la ceremonia de bodas (Fotos, ©David Bastianoni)

 

No necesito que me ame el mundo entero.
Necesito que me ame una sola persona.
Y esa persona serás siempre tú.

Chiara Ferragni

 

Cientos de flores y fuegos artificiales decoraron la boda de Chiara Ferragni (Fotos, ©David Bastianoni)

 

No puedo garantizar que siempre llegue a tiempo, pero prometo que, aunque sea tarde, estaré allí para siempre.
Fedez

 

Chiara Ferragni y sus seis damas de honor durante los preparativos (Fotos, ©David Bastianoni)

 

Un jardín hiper romántico, fuegos artificiales y vistas a la campiña siciliana para la boda de cuento de Chiara Ferragni y Fedez.


 

Si en la cena de ensayo no se escatimó en rosas rojas, el día de la boda no iba a ser menos. La espectacular y romántica decoración floral acaparó los rincones y jardines de la villa del siglo XIX, Dimora delle Balze, escenario para la boda de cuentos de Chiara y Fedez. Una ceremonia al aire libre con preciosas vistas a la campiña inglesa, decorada con impresionantes arcos florales con hortensias y rosas en tonos empolvados, un camino al altar flanqueado por elegantes arreglos, cientos de pétalos de rosas y un wedding backdrop de fantasía, con hermosas rosas de jardín colgando de árboles.

Sillas y sofás clásicos tapizados en blanco, completaban la elegante decoración provenzal de la ceremonia. Un estilo que se mantuvo durante el cóctel también al aire libre, amenizado con músico en vivo y puestos de comida.

El ‘toque’ The Ferragnez, vino de la mano de los originales y coloridos fuegos artificiales (para que se pudieran ver de día) que estallaron en el momento justo del «Sí quiero». El broche a una ceremonia recordada por los emotivos votos matrimoniales de los novios.

{ ‘The Ferragnez club’, la fiesta pre-boda de Chiara Ferragni y Fedez }

Chiara Ferragni y sus seis damas de honor durante los preparativos (Fotos, ©Sophie Carre e Instagram)

 

El segundo vestido de novia de Chiara Ferragni, también de la Maison Dior, llevaba bordados que narran su historia de amor.


 

El segundo vestido de novia de Chiara Ferragni también es un diseño de alta costura de Maria Grazia Chiuri para Dior. El modelo es uno de los ya míticos e hiper-románticos vestidos que la diseñadora italiana hizo en sus primeras colecciones para la Maison. Un precioso vestido en tul teñido, con falda y corpiño delicadamente bordados con símbolos y frases alusivas a la historia de amor de la pareja: el icónico ojo de la blogger, el dibujo de un león (representando a su hijo Leone), o la letra de la canción ‘Favorisca i Sentimenti’ escrita por Fedez y que le cantó el día que le propuso matrimonio. Un vestido precioso y cargado de significado.

Para este segundo bridal look, Chiara se soltó el pelo en ondas sueltas y lució el otro par de zapatos J’Adore que la firma le diseñó en exclusiva, en color topo y con tacón medio (Sí, la influencer renunció a lucir taconazos en su boda y optó por un tacón más cómodo).

La sorpresa llegó cuando, para la fiesta, Chiara transformó su vestido quitando parte de la falda de tul y creando un tercer look estilo bailarina, con falta tipo tutú, zapatos planos (también el modelo J’adore) y pelo recogido en un moño messy bun. Un estilismo más cómodo para disfrutar toda la noche.

Así de impresionante fue la decoración de la cena de la boda de Chiara y Fedez (Fotos, ©David Bastianoni)

 

Para la cena crearon una impresionante cueva de luces, con mesas transparentes llenas de rosas y largos bufés de postres típicos italianos.


 

Chiara Ferragni y Fedez celebraron una épica boda ‘a la italiana’ (Fotos, ©David Bastianoni e Instagram)

 

Cada momento de la boda #TheFerragnez iba desvelando ambientes y decoraciones épicas.


 

A medida que pasaba el día, se iban desvelando las sorpresas que Chiara y Fedez habían planeado para su gran boda a la italiana. En cada momento y con cada ambiente nos asombraban aún más. La wedding planner Alessandra Grillo y el diseñador Vincenzo Dascanio se encargaron magistralmente de toda esta mega producción nupcial. Y es que un bodorrio como este no sería posible sin el trabajo excepcional de un organizador de bodas (y del presupuesto, claro).

Para la cena idearon una impresionante cueva de luces. Nada de guirnaldas tipo verbena, no. Había millones de pequeñas luces brillando en el ondulado techo y las paredes del salón. Los tonos blancos, rosas empolvados y dorado suave destacaban en la decoración clásica, con sillas Tiffany y mesas imperiales transparentes, en cuyo interior habían rosas frescas. Los bajo platos de cristal traslúcido permitían ver esas flores, creando un efecto de original mantel de rosas. Los centros de mesas seguían con la línea romántica y de grandilocuencia de la decoración floral.

Aquí la personalización la llevaron al extremo típico de los #TheFerragnez; cuyo logo aparecía en todos los detalles imaginables: desde los abanicos en la ceremonia y la papelería, a los botellines de agua, helados, chocolates e infinidad de objetos más.

Fuegos artificiales iluminaron la noche siciliana justo a medianoche (Fotos, ©David Bastianoni)

 

En el mundo de los excesos ‘románticos’ ni Disney ni Kanye West superarían el momento del pastel de boda de Chiara y Fedez.


 

Ya podría Disney fichar a los organizadores de la boda para su próxima película de amor. El mismísimo Kanye West, tan dando a las sorpresas pomposas para su mujer, está ya planeando cómo superar el momento de cortar la tarta en esta boda; que, por supuesto, no iba a ser al uso. En medio de lo que parecía un jardín mágico iluminado, se instaló un mirador sólo para el pastel que colgaba de un columpio de flores. El pastelero Marco Failla creo una tarta de bodas de seis pisos pintada a mano con pan de oro reproduciendo el bordado del segundo vestido de Chiara.

Una excentricidad más de la pareja, que ya de por sí en la cena –con un menú de cocina mediterránea, raviolos incluidos– dispuso de dos largos bufés de dulces, helados, chocolates y todo tipo de postres típicos de la repostería italiana. Incluso un showcooking con los tradicionales ‘cannoli’ sicilianos.

A medianoche el cielo de Noto se iluminó con los fuegos artificiales que (por segunda vez) ponían el broche a la boda guionada de Chiara Ferragni y Fedez; justo al momento de cortar su tarta los dos a solas, en mitad del mirador.

Chiara y Fedez inauguraron su parque de diversiones iluminado tras una cuenta atrás (Fotos, ©David Bastianoni)

 

‘The Ferragnez Luna Park’, el exclusivo parque de atracciones para los novios y sus invitados.


 

Durante semanas se especuló de la posibilidad de que hubiera una gran noria en la boda del año. Así lo hacía presagiar la original invitación desplegable de #TheFerragnez. ¡Y así fue! Pero no sólo una noria, sino todo un parque de atracciones exclusivo para los novios y sus invitados con algodón de azúcar, noria, carrusel, puesto de tirar las latas y otros juegos de feria en los que se podía ganar todo el merchandising personalizado que prepararon: peluches réplica de los novios, alpargatas, tote bag, e incluso tazas y platos conmemorativos a su ‘royal wedding’.

Muchos medios de moda hacen referencia a un mini Coachella, pero lo cierto es que ‘The Ferragnez Luna Park’ es más una referencia a la feria de Coney Island y al niño que llevamos dentro. Una redactora Vanity Fair Italia lo definió como “el sueño de no crecer nunca (…) porque a los treinta años sabes que ‘para siempre’ no existe; sin embargo, en el minuto en que dices ‘Si quiero’, sigues creyendo que la felicidad puede ser eterna”.

Siendo el novio y reconocido músico en su país, el colofón final (y esta vez sin pirotécnica) no podía ser otro que un gran escenario de música por el que pasaron distintos artistas, DJs y el propio Fedez, que cantó en su boda junto a una Chiara pletórica sobre el escenario.

… y comieron perdices. Fin del cuento.
Chiara Ferragni y Fedez disfrutaron como niños de las atracciones de su ‘Luna Park’ (Fotos, ©David Bastianoni)

 

Sí, me ha gustado la boda de Chiara y Fedez y todo ese ‘too much’ tan perfectamente hilado y ejecutado con decoraciones y momentos únicos.


 

Comentarios desactivados