Más allá de la flor: Flowers by Bornay.

De ellos ya hemos hablado y muy seguro seguiremos haciéndolo porque su forma irreverente e insolente de entender la floristería es absolutamente maravillosa, artística y referente de la floristería moderna de nuestro país. Con solo ver uno de sus ramos de novia al instante sabes que es un Flowers by Bornay. Y es que ‘Bornay’ es ya tanto una marca como un estilo.

Joan, Fátima y Marta –el equipo Bornay– ya nos confesaron en la entrevista que nos concedieron en el Nº05 Tendencias de Bodas Magazine cómo es su forma de entender la floristería para bodas y cómo sus aficiones en el arte, la música y la ciencia, por ejemplo, inspiran su peculiar proceso creativo alejando totalmente de cualquier convencionalismo hasta la fecha. Y aquí no es una frase hecha.

Distinguir un ramo de Flowers by Bornay es bastante fácil, sólo hay que fijarse en un par de características que ellos han hecho muy suyas –e impuesto como tendencia floral–. Por ejemplo, los ramos de novia sólo con flores, sin follaje verde: «Nunca hemos pensado en lo verde como relleno. El 90% de nuestros arreglos no llevan hojas, siempre es flor. Esa ya es una técnica nuestra».

Foto, ©Swingyourpics

Foto, cortesía de ©Flowers by Bornay

Foto, cortesía de ©3 deseos y medio

Foto, cortesía de ©Flowers by Bornay

La otra seña de identidad, y quizás la más especial y distintiva, es el uso de la pintura en spray y las flores pintadas; una técnica que han sabido realzar y perfeccionar, y que es su personal forma de ir más allá de la flor. «Sabemos exactamente qué es lo que va bien con spray y que es lo que no –nos cuenta Joan–. Cuando una clienta dice que se imagina tonalidades turquesas o doradas, le damos lo que quiere. No hay flores exactamente turquesas y mucho menos doradas, pero nosotros podemos lograrlas».

Nunca verás dos ramos de novia Bornay iguales, ni que sigan las corrientes habituales como la de los ramos silvestres y campestres; aún así pueden ser románticos, bucólicos, elegantes y originales, siempre con el sello Bornay de combinaciones de flores y colores infinitas. «Un ramo de novia para Bornay tiene que ser como una joya muy especial –afirma Fátima–. La novia no ven sólo un ‘ramo de flores’ sino una extensión de su vestido y el sueño que representa para ella su bodas».